Ficha técnica
- Título: Las esferas invisibles
- Autor/a: Diego Muzzio
- N° de páginas: 220
- Editorial: Entropía
- Año: 2015
Los muertos burbujean; están llenos de una vida oculta.
Puntuación final
- Título: Las esferas invisibles
- Autor/a: Diego Muzzio
- N° de páginas: 220
- Editorial: Entropía
- Año: 2015
Los muertos burbujean; están llenos de una vida oculta.
Este libro consta de tres nouvelles (o cuentos largos), todas situadas en un mismo contexto histórico y social. En este caso, la Argentina de los años 1870 en adelante. Fiebre amarilla de por medio, los tres relatos se moverán dentro del género de terror o el gótico propiamente dicho, intentando retratar no sólo la Buenos Aires de esa época, sino también cómo era vivir en ese contexto, con la peste siempre al acecho, tratando de llevar una vida relativamente normal y, además, sobrevivir.
Básicamente, los tres relatos que componen Las esferas invisibles mostraron un claro crecimiento a medida que iban sucediéndose. Debo decir que me costó bastante adaptarme a lo que estaba leyendo. Al principio, en "El intercesor", se me hacía difícil concentrarme en la lectura; cualquier cosa me distraía, y eso me generaba un gran problema a la hora de entender lo que estaba sucediendo. Pero con el correr de la lectura, me fui acostumbrando al estilo del autor y cada vez me empezó a gustar e interesar más. "El ataúd de ébano" me pareció aún mejor, pero mi fascinación llegó a su punto cúlmine con "La ruta de la mangosta". A medida que iba leyendo, las historias que se contaban me iban absorbiendo más y más, hasta llegar a la instancia de no poder parar de leer. La prosa del autor es bastante compleja, tiene un vocabulario más completo comparado con lo que leo habitualmente. Sin embargo, creo que este factor es lo que hizo que pudiera valorar todavía más el estilo de Muzzio. Toparme con un estilo distinto, darme cuenta de que un escritor puede escribir más "difícil" me pareció una experiencia enriquecedora. Una prosa así no es sinónimo de una escritura densa, pesada o aburrida, todo lo contrario; me pareció de un nivel intelectual muy superior, muy elevado narrativamente. Es de ese estilo de escritura que aunque choque un poco al principio, con el correr de las páginas va empezando a generar esa especie de hipnosis en el lector, la cual se agradece, y mucho.
A medida que voy leyendo cada vez más, hay novelas o relatos que me hacen acordar a otros, de alguna u otra forma. Y los relatos de Muzzio no fueron la excepción. En "El intercesor" encontré algunas referencias hacia la novela de terror Frankenstein de Mary Shelley. Especialmente, teniendo en cuenta cómo está enmarcada la historia. En este primer relato, un personaje le cuenta al otro su historia de vida. En la novela del famoso dr. Frankenstein pasa algo similar. A través del diario del dr. la autora va construyendo el relato que conforma la novela. Me parece una forma excelente de narrar, no solo por ser algo que no se ve todos los días, sino porque permite ver la historia que se cuenta desde un punto de vista totalmente fiable, en el sentido de que es el propio protagonista de esos sucesos el que narra. Es una suerte de historia enmarcada, la cual consiste en que el narrador principal le cede la voz a un personaje secundario (en realidad, no tanto) para que este continúe con la historia. En "El intercesor", el personaje principal es un joven que trabaja en una iglesia y, en una ocasión, una señora le pide que vaya a ver a su marido que está enfermo. Ahí es cuando este joven le "cede" la palabra al enfermo, para que dé su testimonio.
Básicamente, los tres relatos que componen Las esferas invisibles mostraron un claro crecimiento a medida que iban sucediéndose. Debo decir que me costó bastante adaptarme a lo que estaba leyendo. Al principio, en "El intercesor", se me hacía difícil concentrarme en la lectura; cualquier cosa me distraía, y eso me generaba un gran problema a la hora de entender lo que estaba sucediendo. Pero con el correr de la lectura, me fui acostumbrando al estilo del autor y cada vez me empezó a gustar e interesar más. "El ataúd de ébano" me pareció aún mejor, pero mi fascinación llegó a su punto cúlmine con "La ruta de la mangosta". A medida que iba leyendo, las historias que se contaban me iban absorbiendo más y más, hasta llegar a la instancia de no poder parar de leer. La prosa del autor es bastante compleja, tiene un vocabulario más completo comparado con lo que leo habitualmente. Sin embargo, creo que este factor es lo que hizo que pudiera valorar todavía más el estilo de Muzzio. Toparme con un estilo distinto, darme cuenta de que un escritor puede escribir más "difícil" me pareció una experiencia enriquecedora. Una prosa así no es sinónimo de una escritura densa, pesada o aburrida, todo lo contrario; me pareció de un nivel intelectual muy superior, muy elevado narrativamente. Es de ese estilo de escritura que aunque choque un poco al principio, con el correr de las páginas va empezando a generar esa especie de hipnosis en el lector, la cual se agradece, y mucho.
A medida que voy leyendo cada vez más, hay novelas o relatos que me hacen acordar a otros, de alguna u otra forma. Y los relatos de Muzzio no fueron la excepción. En "El intercesor" encontré algunas referencias hacia la novela de terror Frankenstein de Mary Shelley. Especialmente, teniendo en cuenta cómo está enmarcada la historia. En este primer relato, un personaje le cuenta al otro su historia de vida. En la novela del famoso dr. Frankenstein pasa algo similar. A través del diario del dr. la autora va construyendo el relato que conforma la novela. Me parece una forma excelente de narrar, no solo por ser algo que no se ve todos los días, sino porque permite ver la historia que se cuenta desde un punto de vista totalmente fiable, en el sentido de que es el propio protagonista de esos sucesos el que narra. Es una suerte de historia enmarcada, la cual consiste en que el narrador principal le cede la voz a un personaje secundario (en realidad, no tanto) para que este continúe con la historia. En "El intercesor", el personaje principal es un joven que trabaja en una iglesia y, en una ocasión, una señora le pide que vaya a ver a su marido que está enfermo. Ahí es cuando este joven le "cede" la palabra al enfermo, para que dé su testimonio.
Hablando de "El ataúd de ébano", algunas escenas me hicieron recordar mucho al Martín Fierro. No necesariamente por el hecho de que tengan una trama similar, porque de hecho no la tienen, pero sí se pueden relacionar estos dos textos desde el punto de vista de los personajes. En el texto de Hernández, el protagonista termina convirtiéndose en un "gaucho malo" y comienza a delinquir, mientras que en el relato de Muzzio los dos personajes principales finalizan como delincuentes, con el hábito de matar casi por deporte. Por otro lado, en "La ruta de la mangosta" vi similitudes con una novela que leí recientemente y que me gustó bastante: Wasabi de Alan Pauls. Al igual que con el relato anterior, las relaciones no pueden hacerse tanto por el tema principal en sí, sino por algunos otros como la relación de los personajes con las drogas y ese constante escape de la realidad que predomina durante todo el texto.
En conclusión, los tres relatos que incluye Las esferas invisibles me parecieron muy buenos, todos muy originales y magníficamente escritos. Una mejor que la otra, fueron nouvelles que me encantaron por sus personajes, sus historias, sus resoluciones y por cómo estaban planteadas. Un aplauso, prolongado y de pie, para Diego Muzzio.
Puntuación final
10/10
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