"Génesis", de Bernard Beckett

Ficha técnica
- Título: Génesis
- Autor/a: Bernard Beckett
- N° de páginas: 158
- Editorial: Salamandra
- Año: 2010 (2005)

Una joven estudiante de nombre Anaximandro se presenta al exhaustivo examen de ingreso a la Academia, quizás el organismo estatal más importante e influyente de la República. A medida que el examen se va desarrollando, se pone en escena un gran número de reflexiones, pensamientos e ideas relacionadas con la filosofía, la ética, la moral y demás cuestiones que vendrán a desafiar todas las “verdades” que regían el mundo aparentemente perfecto de Anaximandro.

Parece difícil escribir ciencia ficción distópica en el siglo XX, después de que genios como Bradbury, Dick, Orwell o Huxley lo hayan dicho y escrito todo. Las historias que aparezcan en nuestros tiempos pueden llegar a ser un rejunte de todo eso. En Génesis el autor recurre a determinados temas bastante trillados en la ciencia ficción de este tipo: gobiernos corruptos, virus, división social, esa verdad que “no es como te la cuentan”, rebelión, etc. Más allá de esto, Beckett ahonda en la parte filosófica de nuestra humanidad. Por ejemplo, contrapone las figuras de humano y máquina, intentando ver qué diferencias existen entre los dos. ¿Es el cerebro lo que hace nos hace distintos de los robots? ¿La conciencia? ¿El pensamiento mismo? De estos temas ya había hablado Dick, por ejemplo, con las cajas de empatía y los tests en los androides en ¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas?, aunque claro está de otra forma. Con esto parecería ser que Génesis es una historia común que nada tiene para aportar. Sin embargo, no tengo dudas en afirmar que la novela de Beckett es original. El autor innova sobre todo en la forma de contar la historia. La única forma que tiene el lector de conocer más sobre el mundo de Anaximandro es a través de su lección, de su examen. La novela se va estructurando principalmente a partir del diálogo entre Anaximandro y sus examinadores, además de otras formas más visuales como los hologramas que aparecen para ilustrar algunas situaciones.

Otro factor que destaco de Génesis es que logra que conceptos sumamente densos y profundos como el pensamiento, la conciencia, la pregunta de qué nos hace humanos, la verdad, las concepciones de la realidad, etc., sean amenos y entretenidos de leer. Esto lo consigue más que nada mediante la forma en la que hilvana el argumento de la historia, ya que esta se construye con los diálogos entre los protagonistas. De esta forma, la lectura en ningún momento se vuelve densa ni aburrida; es más, Génesis se lee rápido porque, además de que es una novela corta, la forma en la que está narrada generan en el lector esas ganas de seguir leyendo, de ver finalmente qué sucede con Anaximandro y su examen. Sin embargo, también es importante que el lector empiece esta novela sabiendo que debe prestar atención en todo momento porque, si nos situamos en el lugar de la protagonista, ella está dando un examen, por lo que soltará muchísima información de la que nosotros no sabemos nada y en un principio puede resultar un tanto confusa. De hecho, personalmente me costó un poco engancharme, más que nada al inicio, pero luego me fui interesando más en la trama y no tuve problemas para seguir el hilo argumental. Por otra parte, la historia da un giro sobre el final bastante interesante, que por lo menos para mí fue inesperado y le dio a Génesis algo más para destacarse. El factor sorpresa en la literatura es algo que se busca y muchas veces se anhela por parte del lector, pero también complicado de conseguir por parte del autor; sin embargo, Beckett cumple su cometido y logra que el desenlace descoloque al lector y hasta lo obligue a releer los últimos párrafos. Naturalmente, no me refiero a esto como algo negativo, sino que destaco la capacidad del autor para llevar la historia por un camino sin que el lector sospeche y luego llevarla por otro, que de ninguna forma arruina lo narrado anteriormente. El autor da lugar a algunas pistas durante el desarrollo de la historia, pero como no parecen representar nada demasiado importante, el lector quizás no le presta demasiada atención hasta que estos indicios se vuelven relevantes hacia el final de la novela.

Génesis me pareció una buena novela, a pesar de recaer en algunos temas bastante recurrentes en la ciencia ficción blanda. Lo que mayormente destaco de esta novela es que consigue renovar esos tópicos a partir de una forma de narración muy original. Por otra parte, Génesis también encuentra otro de sus puntos fuertes en la construcción de la trama: a pesar de los temas filosóficamente densos que propone es muy entretenida, y logra mantener atrapado al lector durante toda la narración.

Puntuación final

8/10